Hoy en día las personas llevan doble vida: la del mundo real y la del mundo virtual. Las relaciones en el mundo real siguen siendo en apariencia como antaño, todo el mundo tiene una familia y sus amigos. Aún así, estas relaciones se ven afectadas cada vez más por la proliferación de las redes sociales donde la mayoría de los usuarios de Facebook son personas populares con una media de 130 amigos en la página según un estudio llamado How facebook affects you and your relationships realizado por la Online dating University. Lo que no tenemos en cuenta es que, Facebook, este programa que nos parecen tan útil para comunicarnos, en realidad puede dañar las relaciones que tenemos en el mundo real.
Nuestra vida a un clic

La mayoría de las informaciones que se siguen en Facebook son de amigos que apenas se conocen de vista. El problema es que antaño no todo el mundo tenia nuestro teléfono y por lo tanto no tenían acceso a hablar con nosotros y si lo tenían este no le daba acceso a saber donde vivíamos, que gustos teníamos o por donde salíamos. El nuevo formato de Facebook llamado biografía ya expone el tipo de información que Facebook proporciona de sus usuarios: ahora, la gente puede conocer gran parte de nuestra vida con solo un clic. Lo que nos parece una gran herramienta de comunicación, en verdad no deja de ser un escaparate en el que todos los usuarios de Facebook están expuestos. Algunos usuarios de las redes sociales acaban interesándose por las vidas de personas que no tienen presencia en el desarrollo de su vida real pero las acciones de estos desconocidos les afectan, pues invierten mucho tiempo de su vida real para confeccionarse una vida virtual y preocuparse por ella. Tal y como afirmó Vicenç Torras, investigador del Instituto de Inteligencia Artificial, en una entrevista para Portalprogramas "Internet es un gran escaparate. Existe una parte de la información que publicamos para nuestros amigos, aunque normalmente no la ven sólo ellos, y otra parte que publicamos sabiendo que llegará a gente que no conocemos. A parte de esta información que damos de forma voluntaria, también hay mucha información que suministramos sin darnos cuenta: cuando utilizamos los buscadores o las redes sociales, cuando hacemos compras, cuando visitamos sitios web... ".
Facebook afecta directamente nuestro estado de ánimo

Conectarse poco a Facebook puede subir nuestra autoestima
No todos los efectos de Facebook en nuestro bienestar son malos. Como toda práctica, si se realiza con moderación puede tener efectos positivos. Según artículos de expertos los usuarios de Facebook que utilicen poco la red social pueden llegar a subir su autoestima. Por ejemplo, un estudio publicado por el Cyberpsychology, Behavior, and Social Networking journal, llega a la conclusión que como solemos mostrar en Facebook nuestras mejores cualidades, la observación de nuestro perfil durante 3 minutos nos sube la autoestima porque al fin y al cabo nos hace reflexionar día a día sobre nuestros puntos positivos y los exponemos a los demás. El problema empieza cuando se reflexiona demasiado sobre esto y se quiere quedar tan bien delante de los demás que hay quien llega a mentir y a realizar una personalidad virtual distinta a la de su vida real.
La banda ancha móvil influye en la frecuencia de conexión a las redes sociales

Usar las redes sociales con moderación nos beneficia
Como toda práctica es mejor en pequeñas dosis para no quedar enganchado. Aún así, cada vez hay más gente que se conecta de manera regular al Facebook. Es evidente que todo el tiempo que gastamos conectados a Internet y a las redes sociales no lo invertimos en hacer otras cosas en la vida real y este echo perjudica a nuestra personalidad, haciéndonos más introvertidos y acostumbrándonos hablar a través de la pantalla y no cara a cara.